Hoy recorremos los 7 faros de Tenerife, la isla canaria con mayor número de ellos. Siete faros muy diferentes entre si, algunos han visto ya mucho mar y otros son más modernos. Son 4 los faros que datan del siglo XIX: Anaga, Punta de Abona, Punta de Rasca y Punta de Teno. El resto fueron construidos ya en siglo XX.
En un pasado lejano era el majestuoso Teide una de las referencias más importantes para los navegantes pero en cuanto se empezó a navegar más lejos y de noche fueron necesarias más referencias. Se empezaron a utilizar fogatas en los puntos más altos y con el tiempo se fueron protegiendo con estructuras. Después, todos los faros pasaron a iluminarse con carbón o leña. Daban luz pobre y de poco alcance.
Los primeros faros de Canarias responden al Plan General de Alumbrado de las Islas Canarias de 1857 por la necesidad de iluminar las zonas oscuras de la costa. Se empieza a utilizar el petróleo como combustible. Era necesario el trabajo de los fareros que a menudo debían vivir en zonas completamente aisladas, de complicado acceso y con el mínimo contacto con la civilización. Hoy los faros de Tenerife se encuentran totalmente automatizados y ya no es necesario la presencia de esos guardianes de la luz que tanto contribuyeron a la seguridad marítima.