En La Barranquera no viven más de 40 personas a lo largo de todo el año. Es un sitio extremadamente tranquilo y solitario salvo en verano, cuando recibe a los vecinos de la zona. Sin embargo sigue siendo un gran desconocido para el resto de residentes en la isla de Tenerife. Nosotros mismos lo descubrimos por pura casualidad.
Que un lugar mantenga su esencia no quiere decir que por necesidad sea un escenario de postal. Por lo tanto no pienses que aquí vas a encontrar un pueblo de casitas ideales y playas de ensueño. El fuerte de La Barranquera no es precisamente su urbanismo, algo loco y descuidado, sino su carácter marinero sin retocar, como una joya en bruto que no entiende de modas. Y aunque sus playas no sean las más idílicas del Archipiélago, hay buenos lugares para darse un chapuzón como La Caleta junto al embarcadero y varias playas de arena negra y callaos. No hace mucho se acometieron algunas obras para mejorar el litoral y ahora hay escaleras para acceder el mar en la parte rocosa y una plataformas de madera para tomar el sol. Si el tiempo no acompaña son muchos los pescadores que se acercan a echar la caña.
[…] Siguiendo al folelé Sin categoría 28 septiembre, 2022 3 minutos LA BARRANQUERA […]