Existe en el sur de Tenerife una pequeña localidad al margen aún de los desmanes turísticos, tranquila y sosegada. Es Playa de San Juan, en el municipio de Guía de Isora. Su clima soleado durante la mayor parte del año le ha hecho experimentar un gran desarrollo pero de momento ha sabido conjugar tradición y modernidad, evitando caer en los excesos de las muy saturadas Playa de las Américas o Costa Adeje.
Sin tener un gran patrimonio cultural, este pueblo de pescadores destaca por su playa y sus paisajes costeros, bien flanqueados por los acantilados de
Los Gigantes, el
Teide y la isla de
La Gomera.
En definitiva, un buen lugar para relajarse y huir de las masificaciones. Si además queremos complementar el día con una caminata, te proponemos una sencilla ruta por el Paseo Litoral de Playa de San Juan, con hermosos acantilados, pequeñas calas y secretas ruinas abandonadas.