Soy una turista de calidad y no llego al gasto medio

Soy una turista de calidad y no llego al gasto medio

23/04/2022 0 Por lucollado

Últimamente no paro de oír que lo que necesita Canarias (y España) es un turismo de calidad. El concepto en sí ya genera división de opiniones. Lo habitual es que se analice desde una perspectiva económica y se relacione turismo de calidad con un alto poder adquisitivo pero ¿acaso son de tercera aquellos viajeros que optan por viajar de forma más económica?. Yo me considero una turista de calidad y ni de lejos llego a los 154 € que un turista gasta al día de media en Canarias (datos de 2021). Entonces, ¿por qué soy una turista de calidad si no me da ni para cubrir la media?.

Camping Invernaderito | Tejina
Los turistas de calidad a veces vamos a campings

La realidad es que son contadas las ocasiones en las que me he alojado en un hotel de las grandes cadenas que abundan por nuestras costas. No me siento a gusto en ellos y supondría invertir gran parte de mi presupuesto de viaje. Tengo claro que para mi estancia elegiré un hostal, una sencilla casa rural o por qué no, un camping. Desayunaré en el bar de abajo y me proveeré de víveres en alguna tienda cercana. Como me gusta mucho conocer la gastronomía de cada sitio que visito lo más seguro es que me acerque al mercado en busca de buenos productos locales. Tampoco tardo en enterarme de cuáles son los mejores mercadillos porque siempre me gusta comprar ropa y artesanía tradicional. Indago si hay ferias, festivales, conciertos o celebraciones populares para tomarle el pulso a cada ciudad o pueblo. También voy a museos y edificios emblemáticos por los que pago la entrada. Y como cualquier turista ávida de experiencias extremas pero que ya tiene una edad hago deporte sensato como kayak, buceo o senderismo de la mano de alguna empresa local. 

San Sebastián de La Gomera | Museo Arqueológico
La cultura no puede faltar para cualquier turista de calidad

Mis posibilidades me impiden ir con frecuencia a cenar a restaurantes de los caros o a tomar una copa al Beach Club de moda pero preguntaré a algún vecino por sus sitios favoritos. Así descubriré el Bar Juan Luis o algún guachinche escondido. También un bar de copas muy molón que acaban de montar unos jóvenes canarios muy majos.

No habré dejado una perra a la industria turística organizada pero sí a la familia Dorta que regenta un pequeño hostal de playa; a Guacimara, del bar de abajo; a Andrés, que pesca y cocina su propio pescado en el local que lleva su nombre.

Dónde comer en Fuerteventura
El turista de calidad ama la gastronomía local

Como turista de calidad que soy trato de minimizar mi huella ecológica. Porque el turismo no sólo se mide en términos económicos sino también por el impacto ambiental que deja en el planeta. La preocupación por el medio ambiente es algo que no depende del poder adquisitivo del viajero. Por eso la meta del turismo de calidad será atraer turistas más sensibles con estos temas.

En las Islas Canarias se proyecta cada vez más la construcción de hoteles de 5 estrellas y establecimientos de alto standing para seducir a un turista de lujo que eleve el gasto medio. Eso sí, dentro de ellos. Muchos a menudo están en manos extranjeras. Por no hablar del impacto ambiental que causan o de su modelo de empleo precario. Porque la industria turística es muy lista y ha creado un nuevo cebo para dirigir el gasto de su turista de calidad: la exclusividad. Y ya sabemos que la exclusividad es un privilegio que se compra a golpe de talonario.

Turismo de calidad
La exclusividad a menudo es gratis para el turista que la sabe buscar

Mientras tanto los turistas de calidad sin cuartos somos incluidos en ese concepto ahora tan denostado de turismo de masas porque no tenemos acceso a la exclusividad. Los que no sabemos verdaderos turistas de calidad aunque nuestro poder adquisitivo sea menor queremos seguir conociendo nuestra tierra sin tener que gastar ingentes cantidades de dinero en dudosas experiencias exclusivas. Queremos contar lo bien que lo pasamos en aquel viaje a Tenerife en el disfrutamos de sus gentes, de la naturaleza y de tantas cosas bellas que querrán venir a conocerlo. Aportamos valor aunque a veces vayamos a la playa con nevera y bocata. 

La verdadera calidad es el respeto por tu entorno